Lindamos con un nuevo año.

Mañana culminamos el año. Mañana es el día en el que nosotros, los humanos, hemos llegado a la convención de que debemos celebrar que la tierra, ha dado una vuelta más al cuerpo astral que nos provee calor y permite que la vida prolifere. Hay que prepararse bien para pasar esa barrera invisible, ese punto de no retorno que nos dice que el tiempo pasa. El tiempo pasa, sí, y no vuelve.

Hay un momento en la vida en el que toda persona se empieza a preocupar sobre como se hace mayor. En menor o mayor medida todos notamos los achaques del tiempo en nuestros huesos, en nuestra vista, en nuestros pulmones, en nuestro cerebro, y nos entra prisa por hacer todo aquello que sabemos que habrá un momento en el que no lo podremos hacer. Nos planteamos si estamos aprovechando bien el tiempo, y nos engañamos diciéndonos que sí, que sí. Pero la pregunta correcta es: si nuestra vida comenzara de nuevo¿Estaríamos dispuestos a cometer los mismos errores? La respuesta es sí.